Los cócteles, deliciosos, una mezcla de diferentes bebidas, que contiene por lo general uno o más tipos de bebidas alcohólicas, aunque puede ser preparado sin bebidas alcohólicas a base de otros ingredientes como jugos, frutas, miel, leche o crema, o especias. Esta creativa bebida puede ser una muy buena idea para emprender. Ejemplos de negocio como es el de The Ministry of Cocktails no recuerdan que, muchas veces, hay que darle un par de vueltas a una idea para conseguir grandes resultados.
Por otra parte, si hacemos lo que todos y no proponemos fórmulas nuevas ni apostamos por la innovación tenemos más posibilidades de que nos cueste destacar y hacernos un lugar en el mercado.
David Cárdenas es el emprendedor detrás de esta idea, quien habiendo trabajado dirigiendo un local en Barcelona, además de una revista de estilos de vida para hombres y organizando eventos vio claramente el filón del mundo de los cócteles. Si bien, este visionario emprendedor en lugar de abrir el típico bar donde sirvieran este tipo de bebidas se planteó un servicio completo para dar todo aquello que rodea este mercado.
Empezó en 2012 con la organización de eventos como principal apuesta. De este modo, como comenta “nuestra web es un escaparate de lo que pasa en el mundo del cóctel, últimas tendencias, ver los mejores establecimientos y valorarlos”. La cosa no terminó ahí y también lanzó una pequeña tienda online con utensilios de coctelería y una academia en la que imparte clases de preparación de bebidas.
Los Tipos de Cóctel más Conocidos
Revistas como la de este empresario nos acercan a la realidad de un mundo rico en sabores y en posibilidades. Al principio, para mí era sobre todo un hobbie del que disfrutaba mucho aprendiendo y descubriendo la variedad de bebidas y sus historias.
Uno de mis cócteles favoritos el Bloody Mary que es uno de los cócteles más bebidos en Estados Unidos. Sin embargo, nadie sabe a ciencia cierta cómo comenzó su historia. Dicen que, en París, un americano llamado Petiot mezcló vodka y zumo de tomate a partes iguales.
El Mojito tampoco puede faltar en una carta de cócteles, este popular cóctel cubano, elaborado con ron, azúcar, menta, lima y soda, siempre ha sido una de las peticiones más habituales en las barras de todo el mundo, y es que su dulzura y frescor característicos no son para menos. La bebida se inventó en La Bodeguita del Medio, en La Habana, donde Ernest Hemingway solía beber.
Otro que suelo pedir a menudo es el tequila Sunrise o Acapulco, que es un cóctel preparado de dos maneras diferentes: la original, con tequila, crème de cassis, jugo de lima y agua con gas; la forma más popular está hecha con tequila, jugo de naranja y granadina. El cóctel, que originalmente se servía en el Arizona Biltmore Hotel en Phoenix (Estados Unidos), debe su nombre a su apariencia cuando se sirve en un vaso: los ingredientes con mayor densidad (el casis o la granadina) se hunden gradualmente, creando variaciones de colores semejantes a los de un amanecer (sunrise, en inglés).
El Mai Tai también es una delicia, se dice que Victor J. Bergeron, de Trader Vic’s, creó la bebida para unos amigos tahitianos que estaban de visita. Al probar el primer sorbo, uno de ellos exclamó “Maita’i roa ae” (que significa literalmente “¡muy bueno!” en tahitiano) y de ahí surgió el nombre.
El Dai Quiri es un tipo de cóctel hecho a partir de ron blanco y zumo de limón criollo o lima. El nombre del daiquirí proviene de una playa cerca de Santiago de Cuba y de una mina de hierro en la zona. El cóctel habría sido inventado por un ingeniero estadounidense que trabajaba en esa mina, Jennings Cox, quien dio forma a la bebida cuando se le acabó la ginebra y tuvo que entretener a unos invitados de su país.
Después de aprender todos estos cócteles, empezó a apetecerme hacer pequeñas fiestas con el cóctel como estrella, me lo tomé muy en serio, tanto que hasta conseguí copas de cóctel en Giona Premium Glass una marca de cristalería profesional que crea una gama muy variada de productos de gran calidad y resistencia.