En el post de hoy queremos descubrir un poco más uno de los productos que se ha convertido por méritos propios en un caso de éxito mundial, el asfalto. Y es que tan solo basta con que salgamos a las calles de nuestras ciudades para ver como el asfalto está presente en todas y cada una de ellas y, por ello, es por lo que creemos que se merece un post en exclusiva para conocerlo mejor, saber que es y, por supuesto, conocer sus variedades, algunas de ellas, incluso ecológicas. Por todo ello y sin más dilación, conozcamos de lleno al asfalto.
El asfalto es un compuesto resultante de la mezcla de diferentes tipos de áridos y un ligante hidrocarbonado, llamado betún. Así, de la combinación de ambos se obtiene una mezcla bituminosa a la que llamamos mezcla asfáltica u hormigón asfáltico y que se conoce popularmente como asfalto. Este producto resultante nos ofrece múltiples usos, sin embargo, el más extendido es el de la pavimentación que, ya sea en forma de asfalto frío o asfalto caliente, se usa habitualmente en la realización de carreteras y diferentes pavimentos, así como para la reparación de los baches y grietas ocasionadas por el paso del tiempo y las diferentes condiciones climáticas, aunque también en zanjas y calzadas de urbanizaciones.
Además, en función de las necesidades y particularidades de los diferentes tipos de construcciones o rehabilitaciones, podemos encontrar varios tipos de asfaltos. Estos poseen particularidades que los hacen perfectos para los distintos tipos de usos que podemos encontrar y son, entre otros:
- Hormigón asfáltico frío, que puede ser:
- Asfalto frío fabricado en frío. Es el asfalto de cubo tradicional fabricado en frío. En la actualidad está en desuso, incluso prohibido por multitud de ayuntamientos por su escasa eficacia en la reparación de los baches, ya que su durabilidad es corta y la reparación temporal. Además, es más caro y contaminante por utilizar disolventes y emulsionantes.
- Asfalto frío fabricado en caliente. Es un producto innovador en el mercado por su tecnología en la fabricación, utilizando un betún modificado con polímeros naturales que, al fabricarse en caliente al modo tradicional, se deja enfriar durante dos días y se puede envasar en sacos de plástico y almacenar hasta tres años. Además, entre las múltiples ventajas que presentan los sacos de asfalto en frío se encuentran las siguientes:
- Aplicación instantánea, rápida, fácil y limpia, pues no mancha. Para aplicaciones pequeñas no es necesaria la utilización de maquinaria pesada y no es necesario aplicar imprimación ni sellado.
- Ahorro de la materia prima: esto se debe a que se puede aplicar justo el material necesario gracias a que el asfalto en frío en sacos nos permite medir a la perfección la cantidad que vamos a usar. Además, el sobrante puede ser almacenado y reutilizado.
- Versátil: es perfecto para cualquier tipo de reparación asfáltica, para obras pequeñas o urgentes en vías públicas, baches y zanjas o reparar grietas. El asfalto frío puede ser aplicado con cualquier tipo de meteorología adversa que sería imposible con cualquier otro tipo de asfaltos, como lluvia, frío, calor o incluso con nieve. Admite temperaturas desde -20ºC hasta +50ºC.
- Apertura al tráfico inmediata.
- Ecológico: no incluye disolventes ni emulsionantes contaminantes.
Otra de las particularidades que presenta el asfalto en frío, es la facilidad de uso que presenta y que podemos resumir en cuatro sencillos pasos:
- Limpiar la superficie a trabajar.
- Colocar la cantidad exacta del asfalto en frío sobre la superficie, pero dejando copete por encima para que al compactar quede enrasado.
- Esparcir el producto de manera uniforme.
- Compactar la mezcla aplicada.
- Hormigón asfáltico caliente. Como su propio nombre indica, este tipo de asfalto es necesario trabajarlo a altas temperaturas. El mismo aporta un resultado perfecto para la pavimentación de vías y carreteras. Sin embargo, va a ser necesario la utilización de maquinaria especializada que pueda soportar las altas temperaturas, y el corte del tráfico durante un periodo de tiempo considerablemente superior al asfalto en frío.
Por todo ello y ahora que conocemos un poco más de cerca como funciona y que es el asfalto, tan solo nos queda deciros que en la actualidad podéis encontrar decenas de fabricantes de este producto de éxito aunque bien es cierto que si queréis garantizar vuestra obra con las mejores calidades, nosotros os recomendamos que os paséis por Aglomerados GB para conocer sus novedosos productos que, a bien seguro, se adaptarán a vuestras necesidades y os servirán para lograr un resultado con una calidad óptima.
El asfalto ecológico, una innovación del futuro que vemos en el presente
Esta innovación más propia del futuro, el asfalto ecológico, es, sin duda alguna, uno de los trabajos más interesantes que se han llevado a cabo en la Universidad Politécnica de Madrid, donde se ha investigado y se ha desarrollado este nuevo tipo de asfalto que podría considerarse doblemente ecológico. Y es que, por una parte, incorpora en el betún el polvo de caucho procedente de neumáticos fuera de uso, un residuo de gestión compleja. Con esto se lograr dar salida a un material que, aunque reciclable, supone un grave problema medioambiental ya que solo en España se generan al año unas 300.000 toneladas de neumáticos usados. Además, se ahorrará betún, que es un recurso natural que proviene del crudo del petróleo, y la energía que su producción conlleva.
Pero no solo eso, sino que por otro lado, este nuevo asfalto ecológico incorpora una serie de ceras orgánicas que al llegar a su punto de fusión son capaces de disminuir la viscosidad del ligante de la mezcla, logrando también que se pueda disminuir hasta unos 30° C la temperatura de fabricación en la planta asfáltica.