Uno de los principales productores españoles es Imperio Garlic. Su gran valor es que tiene sus propios cultivos para la producción de ajo, lo que les permite poder satisfacer la demanda que tienen sus clientes.
Pero no solo está la producción propia de ajo, tienen un equipo humano con gran experiencia en todo el proceso relativo al cultivo. Este proceso va desde la siembra a la recolección, siendo este un proceso que ha ido madurando durante los años, el cual ha permitido que desarrollen métodos propios que son los encargados de ir marcando las diferencias en sus productos y hacen que se hayan convertido en un productor de ajos de alta calidad.
No solo se limitan a ajos, también en cebollas, trabajan con muchas variedades tempranas y tardías, las cuales hacen posible que puedan suministrar continuamente a sus clientes durante todo el año.
En cuanto a la producción en concreto de ajo, se dedican en especial a cultivar el típico ajo morado español, ajo ecológico, y demás variedades que están acordes con las preferencias de los consumidores, con gran cuidado en la totalidad del proceso, lo que garantiza que van a conseguir siempre los mejores ajos posibles. En el caso de la cebolla siempre han intentado estar a la última en cuanto a las variedades más demandadas en el mercado. El caso de éxito de esta empresa española es también el de un producto con una dilatada trayectoria a nivel mundial.
El ajo en la historia
En la historia del hombre el ajo ha estado presente desde tiempo inmemorial. Existen textos en los que se dice que en la construcción de las pirámides egipcias los trabajadores contaban con una dieta en la que abundaba el ajo. Hasta en textos de Mahoma se habla de que si se aplicaba sobre una herida o picadura, la curación era más rápida.
Lo cierto es que el ajo es de las hortalizas más comunes de la cocina en los países mediterráneos y que, aunque no se conoce su origen, se piensa que se originó en Asia, para luego extenderse por todo el continente europeo. Se caracteriza por su fuerte sabor, lo que hace que sea de los condimentos que más se utilizan en gastronomía.
En Egipto o Roma era consumido por sus importantes propiedades vigorizantes. Siglos después en la Edad Media comenzaron a utilizarse con fines terapéuticos por las importantes propiedades antisépticas, así como en las guerras mundiales, que cuando no había medicamentos, eran el mejor desinfectante para las heridas.
Corría la década de los años 40 cuando Arthur Stoll con sus estudios, dio el respaldo científico que se necesitaba a las creencias populares. Lo que hizo fue descubrir la aliina en el ajo, de la cual proviene la alicina, que es una sustancia con un elevado poder bactericida. Por lo que los beneficios del ajo quedaron probados científicamente.
Principales beneficios del ajo
Consumiendo y usando el ajo podemos contar con importantes beneficios para nuestra salud, vamos a hablar de algunos de ellos:
- Se produce una gran respuesta de nuestro cuerpo ante virus, bacterias u hongos.
- Se le añaden propiedades como ser anticoagulante y vasodilatador, aumentan el tamaño de los vasos sanguíneos, lo que hace que la sangre fluya de forma más libre y sin presión alguna. Todo esto permite que la circulación mejore y haya menos probabilidad de enfermedades como la hipertensión. De la misma manera protege nuestro corazón, arterias y se encarga de que estemos libres de colesterol.
- Las propiedades diuréticas permite que el consumo del ajo sea de lo más recomendable cuando sufrimos de tensión alta o tenemos riesgo de presentar una enfermedad cardiovascular.
- En usos tópicos, se acostumbra a servir como antiséptico
- Debemos también aludir al aumento que produce en las secreciones bronquiales, lo que hace que se le atribuyan propiedades de carácter expectorante y desinfectantes, por lo que es bueno para tratar congestiones, resfriados y diversos catarros.
- Colabora a aumentar el nivel de insulina, por lo que es altamente recomendable para las personas que sufran de diabetes, pues regula los niveles de azúcar en la sangre.
- No olvidemos también que existen estudios que hablan de la generación de serotonina, por lo que es bueno para combatir contra el estrés y la depresión.
- Una función también que tiene es la de acabar con disenterías, infecciones o diversos parásitos intestinales